Por Edilberto Orozco Arbelaez, MD, Phd.
La salud de la población migrante en España es un tema complejo y multifacético. En general, el acceso a los servicios de salud en España está garantizado para todos, independientemente de su origen o estatus migratorio. Sin embargo, existen desafíos y disparidades en la atención médica que enfrenta a diario la población migrante.
Uno de los principales desafíos es el acceso propiamente a la atención médica. Algunos migrantes pueden enfrentar barreras administrativas, como la falta de documentación o seguro médico, lo que dificulta su acceso a los servicios de salud. Sin embargo, en España existen programas y políticas específicas para garantizar la atención médica de los migrantes en situación irregular, incluyendo la asistencia sanitaria de urgencia y la atención primaria.
Desafíos
Además del acceso, la salud de la población migrante también puede verse afectada por otros factores, como las condiciones socioeconómicas, la barrera del idioma, la falta de conocimiento sobre el sistema de salud y las diferencias culturales. Estos factores pueden influir en la capacidad de los migrantes para buscar atención médica a tiempo, lo que puede llevar a diagnósticos tardíos o a una atención deficiente.
Para abordar estos desafíos, se han implementado diversas iniciativas en España, como programas de atención primaria específicos para migrantes, servicios de interpretación y mediación cultural en los centros de salud, y campañas de sensibilización y educación sobre los derechos y servicios de salud disponibles para los migrantes.
Eliminación de barreras
Si bien se han realizado esfuerzos para garantizar el acceso a la atención médica de la población migrante, aún existen desafíos y disparidades en la salud de este grupo. Es importante seguir trabajando en políticas inclusivas y en la eliminación de barreras para garantizar una atención médica equitativa y de calidad para todos los migrantes en el país.
Actualmente la sanidad española debe enfrentar este y muchas otras situaciones adversas frente a su deber de garantizar los servicios personales y no personales de salud no solo a la población migrante sino a todos los residentes y nacionales españoles. No obstante, se ha responsabilizado de proveer la atención necesaria con los medios disponibles.
Sin embargo, se presentan problemas en comunidades que concentran las mayores poblaciones inmigrantes, registran también los mayores porcentajes de consultas saturadas (10,2% y 10,4%). La excepción la marcan Murcia, La Rioja y Navarra, que a pesar de contar con porcentajes relevantes de población inmigrante (11,7%, 8% y 6,9%), superiores a la media nacional, presentan unas tasas reducidas de consultas con más de 2.000 personas (5,04%, 1,48% y 1,13%, respectivamente) (1).
(1) El sistema sanitario y la inmigración en España desde la perspectiva de la política fiscal.
