Convenio “Río Los Baos: Agua y Desarrollo” en República Dominicana
Alfonso Morillo, Cátedra Riego y Mecanización Universidad Autónoma de Santo Domingo. República Dominicana; Esther Reyes, Directora de Desarrollo Provincial y Acueductos Rurales del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (INAPA), y Juan Francisco Saldaña, Programa Cultura del Agua, Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, INDRHI.
Dionisio García Carnero, miembro del Patronato de la Fundación Humanismo y Democracia, durante la jornada celebrada en el Centro de Participación e Integración de Inmigrantes – CEPI de la Comunidad de Madrid de San Sebastián de los Reyes, gestionado por Humanismo y Democracia.
La clausura de la semana se realizó en el Centro de Participación e Integración de Inmigrante – CEPI de la Comunidad de Madrid de Tetuán, con la presencia de Felipe Herrera, Ministro Consejero de la Embajada de República Dominicana en España, y el Cónsul de República Dominicana en Madrid, Rafael Acosta. Les acompañan en la foto: los panelistas Juan Francisco Saldaña, Esther Reyes y Alfonso Morillo; También, José Crespo, Coordinador de comunicación y campañas en ONG CESAL; Raúl Jiménez, Director CEPI- TETUÁN; Olga Ruíz, Coordinadora de Proyectos de H+D; Marina Pimentel, Directora de H+D República Dominicana; Josefina Guante, responsable de Género de la delegación Fundación Humanismo y Democracia República Dominicana; y Doris Araújo, Educadora.
Video “Cuando el río suena”, relacionado con las actividades desarrolladas allí y que puede verse en: link
• 3 de cada 10 personas carecen de acceso a servicios de agua potable seguros.
• 6 de cada 10 carecen de acceso a instalaciones de saneamiento gestionadas de forma segura y practican la defecación al aire libre.
• más del 80% de las aguas residuales se vierten en los ríos o el mar sin ningún tratamiento provocando su contaminación.
• Cada día, alrededor de 1.000 niños mueren debido a enfermedades diarreicas asociadas a la falta de higiene.
Con el “Convenio Río Los Baos: Agua y Desarrollo” se ha trabajado durante 5 años para beneficiar directa e indirectamente a más de 45.000 personas:
• Facilitando el acceso al agua potable, la promoción de la salud y la lucha contra las enfermedades de origen hídrico entre la población más vulnerable.
• A través de la promoción de una Cultura del Agua responsable y para todos, junto con la preservación del entorno de la microcuenca.
• Fomentando la conservación y el uso sostenible de los recursos naturales que garanticen a futuro la disponibilidad de agua en el territorio.
“El agua está asociada a toda nuestra vida por más que queramos circunscribirla a las necesidades básicas. Y ha sido así desde siempre”, afirma Juan Francisco Saldaña al inicio de la Semana sobre “El agua como fuente de progreso”, en el Centro de Participación e Integración de Inmigrante – CEPI de la Comunidad de Madrid de San Sebastián de Los Reyes. “El agua ha estado en el desarrollo de la humanidad; las poblaciones más relevantes de toda la historia han estado cerca del agua”, continúa, para explicar el fenómeno y conocer la realidad que sucede en República Dominicana y las tareas que se han desarrollado en el marco del proyecto en la cuenca del Río los Baos, en San Juan de la Maguana, de la mano de la Fundación Humanismo y Democracia y CESAL.
Por su parte, Esther Reyes sostiene que este proyecto se destaca por la integralidad: “no se puede desarrollar un programa de agua potable sin saneamiento; la participación comunitaria como protagonista y arquitecta de su desarrollo; alianzas estratégicas con el gobierno y otras instituciones; integrar el sector salud, el agrícola y medio ambiente en la preservación del recurso. Y luego de terminar el proyecto se le transfiere a la comunidad la administración, operación y mantenimiento de su propio sistema para su sostenibilidad, a través de una ASOCAR, Asociación Comunitaria de Acueducto Rurales, procurando la equidad de género. En el campo, el agua no es solo un tema de salud o bienestar, es un tema de orgullo y de dignidad humana, puntualiza. Alfonso Morillo desarrolló su intervención sobre el agua y los medios de vida. Crear conciencia de la necesidad de actuar, restaurar el cauce del agua, sembrar árboles en los nacientes de los ríos, modificar la agricultura por aquella que no necesite tanta agua y utilizar técnicas para su uso eficiente; reeducar a las personas en este sentido y construir reservorios, son algunas de las actividades que se han adelantado durante este convenio. “Ya las personas están organizadas y una vez que el agua está presente, podrán desarrollar con normalidad su medio de vida y entendemos que esta es la vía para salir de la pobreza”, concluye el experto dominicano.