Karmen Ramírez, se posesiona como Representante por los colombianos en el Exterior

“Un día histórico. El Congreso colombiano ahora es diferente: negros, indígenas, campesinos y mujeres en paridad lo cambian radicalmente. El enfoque territorial se hace presente, lo que representa una diversidad de sensibilidades presentes en la sociedad que se hacen sentir y muestran un panorama diferente. Las mayorías del cambio son visibles y se harán notar con trabajo e iniciativas que vienen de las regiones”, han sido sus primeras declaraciones durante la instalación del congreso.

Rompiendo esquemas y rompiendo estigmas

“Los indígenas no estamos relegados a luchar única y exclusivamente por la tierra; estamos, además empoderándonos para trabajar por la Colombia que necesitamos. El nombramiento de grupos minoritarios en esta Cámara ha sido fundamental para que Colombia avance y entienda que los pueblos indígenas, no solamente estamos en el territorio con guarieñas (sandalias Wayuu) y los pies sucios, sino que también podemos hablar desde diferentes escenarios”, aseguró Karmen.

“Hemos estado en la ONU, hemos estado recuperando tierras y desde el gobierno hablaremos de paz y, ahora, desde el Congreso, estamos rompiendo esquemas y rompiendo estigmas”, proclama Karmen.

Derechos de la migración

“Soy una mujer indígena del pueblo Wayuu, elegida para representar a la colombianidad que vive en el extranjero. Tenemos una agenda bastante diversa para el tema internacional, especialmente en lo que tiene que ver con la garantía de los derechos de la migración colombiana en el mundo, y por supuesto, el tema de mujeres hace parte de nuestra agenda.

Para nadie es un secreto que la trata de personas en América Latina es una crisis y Colombia no es ajena a ella. Nuestra propuesta es trabajar de la mano de programas internacionales para que se reduzca esta problemática.

Además, tenemos una agenda muy enfocada a identificar la colombianidad en el exterior. A nosotros no se nos reconoce. Somos el segundo renglón de la economía nacional, mandamos remesas por cerca de 9 mil millones de dólares, invirtiendo en Colombia más que las transnacionales, y la representación de los colombianos en el exterior es una sola en la Cámara de Representantes”, afirma Ramírez Boscán.
Más de 5 millones en el exterior

Representación adecuada

“Tenemos que saber primero, cuántos colombianos y colombianas somos en el exterior, para garantizar una representación adecuada, de acuerdo con la población que reside en el exterior. Se tenían dos curules para 5 millones de colombianos según los censos oficiales, aunque tenemos estadísticas que indican que somos mucho más. Conseguir logros como el de Ecuador que cuentan con 5 representantes para sus compatriotas residentes en el exterior.

Hay que comenzar a trabajar en este sentido porque estamos aportando a la economía de este país y es una economía que dinamiza a nivel nacional. En tiempos de pandemia, cuando Colombia estaba confinada, fuimos nosotros desde el exterior, quienes enviábamos dinero de nuestro trabajo a nuestras familias para pagar el arriendo, la luz, “huevos de 1.800”, para pagar la cotidianidad de la gente. Nuestro compromiso es ver de qué manera garantizamos que los derechos de la migración colombiana sea un tema en la agenda política nacional e internacional».

Reforma del sistema consular

«Estaré trabajando desde la Comisión Segunda, para reformar también un sistema consular que no funciona, un sistema consular que hasta el momento ha servido a la mermelada, al clientelismo y a la corrupción”, concluye Karmen Ramírez, Representante a la Cámara por la circunscripción territorial internacional, por la coalición Pacto Histórico, movimiento político Colombia Humana.